Un 17 de Sol con Cristina

No es novedad celebrar que hay tiempos de cambios en nuestro país, pero vaya sí los hay que éste 17 de Octubre, enmarcado en los sesenta años de la primer transmisión de televisión, encontró a los leales festejando en la Ex ESMA.

La cita era a las 16hs. en Crisólogo Larralde y Av. Del Libertador. Claro que la emoción venía desde la noche anterior, con los pies mojados en la fuente al ritmo de los cánticos que ya comienzan a darle rienda suelta al triunfo del 23, y recordando, siempre recordando, a los compañeros que ya no están… pero sí, claro, están presentes (ahora y siempre).

“Feliz día” fueron las palabras mas oídas y sentidas, acompañadas por el abrazo y por ese brillo intacto que se lleva en los ojos cuando la historia de amor esta viva. Como la lealtad, que sigue viva, y crece embanderada gracias a la guía de la compañera Cristina, que le da vuelo a los sueños que la llevaron a iniciar su militancia y fueron truncos por los que se despojaron del sentido de Patria, y se ensimismaron en el afán de esclavizarla a intereses propios.

El acto una vez más convocó a (miles) de jóvenes y familias que aplaudieron a lo largo del transcurso del encuentro. La emoción fue protagonista y alimento necesario para que la alegría contenga a los presentes, y sí, siguiendo el ritual…  a los que llenaron aquellas plazas, a los que llevaron el peronismo a cada rincón - incluso sin televisaciones y luego defendiendo el toreo a través de ella -, a los que dieron batalla del corazón en la búsqueda incesante de justicia social, ellos a los que nos arrancaron de la vida pero están acá y seguramente pensando “vieron que se podía?” iluminando uno de los espacios mas oscuros de nuestra historia argentina.

La hora mágica de las ciudades, ahí en el momento culmine del atardecer, comenzó a pasar en las pantallas esa inauguración televisiva allá en 1951. Su voz, sus acentuaciones, su pasión desenfrenada y sus palpitaciones que hacen sentir cada palabra como el dolor mismo, y a su vez, saben a la máxima concreción del hablar desde el amor, hicieron que la piel de gallina contagie a cada uno para escuchar a la Abanderada de los Humildes. Eva Duarte de Perón ahí poniéndole su pecho inmenso, habitando su pequeño cuerpo y haciendo que aquellos gestos de este mismo pueblo se vuelvan grandiosamente dignos y para que siempre se selle esta historia sin fin que es la del peronismo.

 

Eva hablaba, y fuera de tiempo, el discurso de un día como hoy pero de hace sesenta años atrás, estaba vivo y familiarizado con la realidad afectiva que nos cobija bajo el manto de Cristina. Pulmones revolucionarios, ADN patrios y un amor sin igual que han de llevar a la Patria a los estados más felices que los pueblos pueden tener timoneados por los propios Jefes de la Nación.

Para continuar se dio inicio a una videoconferencia en la que se comunicaron en primer lugar con ¿Julián Dominguez? (me acuerdo que dijo Julian ella! Jaja), y luego con José Luis Gioja, en San Juan, con quien mantuvo un intercambio muy afectuoso en el contexto de la presentación que los sanjuaninos disfrutarían luego de la película “Juan y Eva”. El gobernador la despidió con un “sos enorme Cristina”.

Y llegó el turno de ella. Ahí estaba la Presidenta, Compañera Coraje supo llamarla quien mas la conocía, y el mundo puede comprobarlo a diario. Sus sonrisas y sus manos inquietas, sus ojos grandes que parecen poder captar las miradas de cada uno de los miles que allí estaban, y en ese intercambio, lograr comulgar con la mayor demostración que un gobernante puede recibir: gratitud y sí, recurrentemente y con subrayado, hay que hablar de lealtad.

Cristina, la mujer que no se despoja de su identidad militante, comenzó compartiendo los susurros emotivos del video que se había pasado con Eva: “Jamás había visto esa imagen de Perón pidiendo silencio”. Y continúo disculpándose por lo que diría pero “un día como hoy no sería sincera sino digo que gracias al peronismo es que los argentinos tenemos derechos: aguinaldo, vacaciones, educación, salud. Muchas veces los politólogos se preguntan y analizan acerca de porque perdura el peronismo, y es por que pivotea desde lo mas profundo de las batallas que es la batalla social, por la libertad y la igualdad. Y si bien hay ventajas sobre aquellas imágenes que veíamos de Evita, esos conflictos aun persisten, y es el peronismo el que contiene esas luchas”.

Escucharla hablar, además de lo formativo y emocionante, es una conversación con quien quiera oírla (¡y qué oigan!). En complicidad y con simpleza, la Presidenta instó a construir una  Argentina mejor, “es la responsabilidad de la generación del Bicentenario, yo la siento en mi espalda, y sin negar diferencias, fortalecer ese formidable organizador que es el trabajo por que esa construcción debe contener a los cuarenta millones que somos, porque el crecimiento nos favorece a todos, no a los que son de tal o cual partido”.  “Evita hablaba de la lealtad a Perón, yo les pido que seamos leales con la Argentina, y con los intereses colectivos, para que después no nos pasen las cosas que ya nos pasaron” enfatizó Cristina.

“Podemos hacerlo, por que hemos superado prejuicios, diferencias, y todo tipo de situaciones. Siempre es bueno mantener antinomias, pero que los intereses del país vayan por delante”. Siguiendo con las diferencias a aquellos años de otros octubres, agregó: “la economía también ejerce su violencia, ese terrorismo de ejercer miedo en todos a que se pueden quedar sin trabajo o la de instalar incertidumbre respecto a como seguirán las cosas… la de disciplinar para que nadie pueda pensar diferente de cómo lo hacen las usinas”.

A cielo abierto, en el superior del escenario se podían ir viendo imágenes de los diferentes canales que pertenecen a la televisión pública. El Ministro Sileoni al inicio del acto le entregó un cuadro a Cristina, con las ilustraciones que llevaron adelante la campaña “Paka Paka para todos”. Con motivo de esta conmemoración, de la primera transmisión, la Presidenta se refirió a como “en aquellos años uno tardaba en enterarse de los hechos, hoy ya no. Yo le temía a la globalización, pero la verdad que viendo como se va balanceando estoy convencida que esta interacción mundial terminará favoreciendo a los pueblos, a los mas humildes.”

“Estamos cerca de cubrir el 100% del territorio con la televisión pública, que es la que tiene el gran desafío junto a la cultura, y es el desafío de la formación, para poder pensar mas y mejor, para poder corregir lo que esta mal y con humildad reconocer las cosas que se hacen. Para aprender, primero hay que entender y comprender”, y luego pidió un aplauso para Paka Paka y Canal Encuentro por la gran labor cultural que llevan a cabo.

Para finalizar reitero su convocatoria a todos los argentinos a acompañar esta construcción diaria que se hace del modelo que hoy celebró su nacimiento, pero que tiene una noción de derechos que trasciende cualquier partido político “formamos algo entre todos, que es nuestro país, la Argentina”, cerró la Presidenta para luego despedirse repitiendo esa frase que tanto sonó y que en ella representa un canto mas al fortalecimiento de la democracia: “Feliz día a todos”.

Así el 17 vuelve a ser un día festivo, en el marco de un mes que sabe trascender las líneas del tiempo y mismo del calendario para hacer historia. A poco menos de una semana de una gran reelección popular de mandato, caminando el suelo de la Ex ESMA, símbolo absoluto de los vientos de cambio, quedó certificado que se sigue profundizando en aquella justicia de la que no mucho se habla porque los no enamorados de su Patria no saben entender, pero que a cada compañero le quita el sueño y lo lleva a comprometerse con su vida. Esa justicia, que es la justicia emocional, la de saber que aquellos ideales que hacen al himno “para que reine en el pueblo, el amor y la igualdad”, y que costo la sangre derramada de muchos compañeros, en estos tiempos se ven al fin realizados, valorizados y sostenidos por puentes generacionales, que hacen al Bicentenario, y que ven como los protagonistas de la nueva era, perciben desde su cuna el abrazo del Estado que los verá crecer y creer. Por que solo creyendo es que se pueden crear nuevas formas.

Ya lo dijo Néstor en ese mismo lugar el 2004, acto que hoy recordó Cristina, haciéndose eco de la memoria de todos los presentes allí seguramente: “Cuando recién veía las manos levantadas, cuando cantaban el himno… veía los brazos de mis compañeros, de la generación que creyó y sigue creyendo que se podía cambiar. Fueron muchas ilusiones, sueños, creímos en serio que se podía construir una Patria diferente”.

Llevó tiempo, se necesitaron dos leales de un sur que existe para poder comenzar, pero ya lo dice la música del pueblo de Perón “no nos han vencido”.

Entrada a la Ex-ESMA de la columna de La Cámpora

Aquella primera televisación:



Este fue el impresionante discurso de Cristina:




Y es imposible no hablar del 17 de octubre sin las palabras del General:

"Las verdades del Justicialismo, como toda nuestra doctrina, pueden confrontarse con nuestras realidades en el orden internacional. Somos lo suficientemente idealistas como para entender que la realidad constituye el supremo ideal. Los pueblos, como los hombres, no han podido aprender la ciencia oculta de vivir soñando; viven de realidades. Y los mejores sueños son los que se cumplen. Por eso, como en el año 1943, yo repito al pueblo: "Mejor que decir es hacer, y mejor que prometer es realizar". Por eso nosotros, con la dignidad nacional, que es la suma de las dignidades individuales que llevamos en el corazón podemos decir que en este 17 de Octubre de nuestras luchas y de nuestras glorias, el Movimiento Peronista, el gobierno peronista y ese maravilloso pueblo peronista, vienen cumpliendo estas verdades de nuestra doctrina política internacional, desde el primer día en que el sol nos encontró madrugando en el gobierno por la felicidad y la grandeza de una Nueva Argentina, Justa, Libre y Soberana."

Feliz día compañeros!